El mio se marchó cuando yo era niño, por los años setenta, se especulaba con el año 2000 que sería el futuro , dispondríamos de mucho tiempo libre gracias a los llamados cerebros electrónicos, máquinas y los robots harían gran parte de nuestro trabajo, imagina vamos un porvenir de progreso, con la paulatina u¡incorporación de tan moderna tecnología a despachos fábricas y jamás intuimos en posibles ejercitos de parados, si no en la evidente reducción de la jornada laboral, para disfrutar de la familia y del ocio mientras se mantenían los salarios, la sociedad ocupada y feliz, se sentirían realizados con esta solución tan simple que proteje el poder adquisitivo y los empleos, necesarios en su conjunto para una economía pujante.
Pero aquel prometedor futuro del año 2000 hace tiempo que sucumbió atropellado por la tenaz realidad existencial de la ansia capitalista,. forjó a base de triturar aquella ilusionante esperanza de nuestros sueños adolescentes.
Pero la realidad es otra y es por ello que los británicos ya han creado un ministerio para atender el problema, y no sería en absoluto descabellado crear uno semejante en España, donde la baja natalidad y la esperanza de vida auguran para un futuro cercano somos una población en la abundarán las personas ancianas, muchas de ellas, están en plena soledad y sin nadie que se ocupen de ellos.
Tendremos que creer que el colchón familiar, tradicional entre nosotros, consigue disminuir las situaciones de abandono, son muchos los viejos que mueren sistemáticamente solos: Es una tendencia que no puede si no aumentar sobre la sociedad que estamos construyendo.
¡ Así que de futuro nada!
Un chiste: mapamundi de Bilbao
Un vasco entra en una librería:me da un
Oiga, ¿ me da un mapamundi de Bilbao?
Nosotros estamos preparados para esperarlos en la próxima estación.
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